sábado, 31 de julio de 2010

Soy una mujer europea romani



Una de las cosas que hemos de tener presentes como mediadores interculturales en España es que la diversidad cultural no es solo cosa de los "extranjeros" que nos acaban de venir de forma rápida en cuatro días. La diversidad cultural es algo que esta mucho más relacionado con nosotros y el país en donde vivimos de lo que habitualmente solemos pensar y el caso de la comunidad gitana que tantos años lleva viviendo en España y continúan siendo desconocidos en su realidad por el resto de los españoles es el mejor ejemplo que podamos poner de lo que hemos mencionado. Este video que os presentamos os puede resultar interesante porque une al tema de la identidad roma el de el papel de la mujer romani y la importancia de la educación para la integración. Esperamos que os guste y os sea de utilidad.

miércoles, 21 de julio de 2010

Mediación aplicada a contextos arqueológicos


Representación de la diosa Isthar, adorada en Babilonia.


Como lo prometido es deuda, de tanto en tanto nos tomaremos el tema de los conflictos y la mediación con un poco de humor y con la pretensión de haceos pasar un buen momento con un post que se saldrá un tanto de la linea que nos hemos marcado.
Este texto humorístico nos sirve muy bien para darnos cuenta de que los seres humanos y las sociedades vivimos en un contexto que se llama cultura y que si no somos capaces de interpretar lo que significan las costumbres y los comportamientos en ese campo cultural no vamos ha entender mucho de lo que sucede.
Se trata de una historia encuadrada en un marco bastante arqueológico que nos es muy lejano tanto en el tiempo como en el espacio pero de la que tenemos fuentes epigráficas, literarias y arqueológicas lo suficientemente buenas para reconstruir e interpretar con cierta seguridad. El autor del texto el periodista José Hermida ha hecho un buen trabajo de reconstrucción arqueológica literaria con un sentido del humor bastante nuestro, pero que es común a la mayoria de las culturas con las que convivimos en nuestros tiempos por lo que suponemos que todos lo encontrareis divertido sin muchos problemas.
En el contexto más serio que nos ocupa, la mediación y la interpretación intercultural, cabe remarcar la importancia de la buena fe en los acuerdos. No es posible la mediación sin una cierta dosis de proceder recto y comprender las necesidades de los demás y la justicia que necesitan.
Este es el texto que es ofrecemos del que no haremos más preámbulos y esperamos que os guste:


Escándalo en Babilonia

En Babilonia se tenía por costumbre que para tomar una controvertida decisión, debíanse reunir los disputadores y llegar a un acuerdo, tras lo cual, convenía que todos se embriagasen cuanto resultase sufrible a cada cual; una vez entregados a la perniciosa bebida, discutían de nuevo el asunto, y si la decisión tomada en la embriaguez resultaba ser la misma que en la abstinencia, se reputaba por buena la solución alcanzada.
Si bien es cierto que cada nación adorna y extiende tanto sus costumbres cuantos más valederos recursos y utilidad en ellas encuentra, no menos sucede que en la rutina se esconde la irreflexión, y en ésta el error, y aquí, en fin, la ruina. Este nocivo proceso fue sufrido por un próspero panadero llamado Nasur, cuya historia deberéis conocer para provecho de vuestras almas y protección de vuestros bienes.
Nasur era el mejor panadero de Babilonia. Se tenía su fama por de alto grado y merecida, pues que Nasur no sólo se entregaba a la de por sí dura tarea del obrador, sino que, yendo personalmente a los molinos del Eúfrates, apartaba la harina del trigo de escanda y no la compraba, por no querer ver en sus panes ni pizca de cascabillo; antes bien cernía incansablemente, y se preciaba de que ni un cabello habría de pasar por las mallas del cedazo. Así cocía su reconocido pan de hallulla, que era el único que marcaba con la artera, en tanto que la harina que no pasaba por la malla quedaba reservada para cocer codornos y marraquetas de las que suelen regalarse a los niños en el domingo de la Resurrección de la diosa Istar, al cabo de la Semana Santa, cuando el pueblo, provisto de laureles y palmas, sale en piadosa procesión.
Debe saberse aquí que la esposa del tahonero era joven, hermosa, fiel, complaciente, trabajadora y agradecida; se llamada Adlila y la naturaleza la había adornado con hermoso talle y lindos ojos color de miel. Ningún panadero de Babilonia pudiese haber deseado más; pero éste no era el caso de Nasur, como se verá.
Un día se presentó en el obrador de Nasur nada menos que el intendente real:
-Tú, panadero Nasur, hijo de siervos, mas empero voluntarioso -comenzó a decir el intendente- entérate de que dentro de doce días llegará el cortejo del embajador de los partos, formado por doce docenas de personas. Entérate también de que el obrador de palacio es insuficiente para proveerles de buen pan. Entérate de que el rey declarará cuatro días de fiestas debido a tan egregia visita y que por lo tanto se hará ofrenda de panes en el templo de Istar. Entérate, en fin, de que se te ordena que suministres a palacio 1.440 panes diarios durante cuatro días a partir de la fecha indicada, por lo que se te pagará un cuarto de dárico la gruesa. Que tengas un buen día.
Una vez se hubo ido el intendente, Nasur, quien se tenía por ducho en el arte de las cuentas, se puso a hacer números. Extendió la palma de la mano derecha, que los babilonios utilizan a modo de ábaco, y valiéndose del pulgar a modo de puntero, empezó a contarse las falanges de los dedos (que son doce en total, y por eso los babilonios no cuentan en decenas, veintenas o cuarentenas, como los demás hombres, sino por docenas y gruesas). Si le pagaban un cuarto de dárico por cada gruesa de panes, es decir, ciento cuarenta y cuatro, significaba que en cuatro días ganaría... ¡10 dáricos! Mas, acto seguido, se dio cuenta de que no podría satisfacer el encargo, porque para hacer 1.440 panes diarios, no sólo deberían trabajar día y noche él y toda su familia, sino que además se necesitaría un segundo horno.
-No está todo perdido -dijo para sí- pues faltan doce días. ¿Acaso en once no podría construir un nuevo horno, dos nuevas artesas y un gran hintero para amasar el pan? Habiendo tomado la decisión, fue a visitar a un vecino que era maestro albañil, quien por ser pobre y muy necesitado de trabajo, podría someterse --pensaba Nasur-- a ominosas condiciones contractuales:
-Necesito que reúnas inmediatamente a una cuadrilla de albañiles y carpinteros, porque en el plazo de tres días he de tener listo un nuevo obrador.
Mintió Nasur con esto, pues ocultaba que el plazo disponible para la obra era de once días, y no de tres; pretendía así, aconsejado por la prudencia, curarse en salud ante posibles imprevistos y beneficiarse cuanto antes del nuevo obrador.
-Yo puedo hacerlo, pero tendrás que pagarme tres dáricos por el trabajo porque debo reunir a nueve obreros.
-¡Tres dáricos! ¡Pero si eso es lo que me va a pagar el intendente real! -mintió de nuevo Nasur- ¿dónde queda mi ganancia?.
-¿Y qué? -replicó el maestro albañil- ¿acaso no te vas a quedar con lo construido? A partir de ahora podrás ganar mucho más dinero con tu nuevo obrador.
-No, no y no. Sólo te pagaría, y como mucho, un único dárico.
Debatieron, negociaron, se crisparon; cada uno declaró cien veces que las condiciones del otro eran inaceptables, y finalmente fijaron el precio de la obra en dos dáricos, más un pan diario para cada operario, es decir, nueve panes por día, que serían panes de acemite de libra y media cada uno. Así se acordó y así empezó a hacerse, pues aquella misma noche comenzaron los trabajos a la luz de las antorchas.
A las doce horas de faena, y ya bien entrado el día siguiente, los obreros reclamaron su pan prometido, pero héte aquí que en lugar de nueve obreros había diez.
-¿Qué es esto? -protestó Nasur ante el maestro albañil- ¿pues no me dijiste que eran nueve hombres y ahora resulta que son diez?.
Contratista y contratante se enzarzaron de nuevo en una discusión. El uno argüía que sin el décimo hombre no se podría rematar la obra en la fecha prevista, el otro replicaba que aquello no era lo acordado, ante lo que el primero aducía que ya empezaba a estar harto y que con aquel trabajo perdía dinero, mientras que Nasur proclamaba que estaba dispuesto a abandonar el proyecto y echarlos a todos a la calle (aunque no era cierto, pues precisaba ver terminado el trabajo, pero la vanidad le tentaba hacia aquella actitud).
Estando así las cosas, uno de los obreros rogó un momento de atención a los contendientes y explicó:
-Señores, por nosotros que no queden las cosas en este punto. Somos unos humildes operarios y no siempre tenemos trabajo. Hénos aquí ahora con la oportunidad de llevar un pan a casa, cada día, durante tres días. No discutan más, señores, que nosotros nos contentamos con nueve panes diarios repartidos entre diez hombres, ¡pero no suspendan el trabajo, por el amor de la diosa!
Este portavoz de los obreros era llamado Iliás, porque decíase que provenía de las tierras del septentrión y que había aprendido el oficio entre los maestros egipcios. Tenía reputación de hombre discreto, pese a su condición extranjera; era de bello aspecto por su lindo cuerpo y rubia cabellera, que le confería un aire de extravagante nobleza.
Parecióles razonable al panadero y al maestro albañil la propuesta de Iliás, de modo que Nasur llamó aparte a la hermosa Adlila, su mujer y le dijo:
-Saca nueve panes, que los voy a repartir entre los obreros. ¡Buen negocio hago, mujer! Tendré en tres días lo que pensaba conseguir en once, y a un precio ínfimo, ya que por esta obra podían haberme cobrado el doble y aun el triple!
Mas héte aquí que Iliás oyó lo que Nasur decía, pues en ese momento se llegaba del pozo con dos calabacinos de agua para la argamasa, y tuvo inmediatamente al panadero por aprovechado, mentiroso y hombre de poca ley. Informó sobre este asunto a sus compañeros, quienes delegaron en él las decisiones que hubieren de tomarse al respecto, pues confiaban en su prudencia.
Vuelto a la obra con los nueve panes, Nasur sacó un belduque para partirlos y dijo:
-Bien. Os tocan nueve décimos de pan a cada uno, puesto que son nueve panes a repartir entre diez hombres. Tomad entonces.
Ya iba a partir el primer pan en dos partes, una de un décimo y otra de nueve décimos, cuando el astuto Iliás detuvo al panadero con estas palabras:
-No haga tal cosa, señor.
-¿Cómo que no? ¿Qué pasa ahora?
-Señor -explicó el obrero- si se parte así el pan, nueve de nosotros se llevarán nueve décimos de pan cada uno, pero en una pieza entera, mientras que el décimo hombre se llevará nueve décimos en nueve piezas. Eso no es justo señor, y debe debatirse, pues aun necesitando como necesitamos el trabajo para procurarnos el sustento, nada hay más odioso que la injusticia, situación que no toleran ni los babilonios ni los extranjeros de bien, sea cual fuere el linaje de cada cual. Debe hacerse otro reparto más equitativo, pues en otro caso, no seguiremos trabajando.
Habló así Iliás, sabedor de la mala fe del panadero, de su oculto negocio y de la prisa que llevaba. Nasur se inquietó. En su prepotencia, no había contado con un inconveniente así.
-¿Cómo habría de hacerse según tú, lindo obrero?
-Señor -respondió Iliás- es costumbre de la ínclita Babilonia discutir los negocios en la abstinencia, y luego, en la embriaguez, verificar si el concierto hallado era el debido. No de otro modo debería resolverse este asunto. No condenaremos a un hombre a percibir nueve menudos fragmentos de pan, mientras que los demás se llevan casi un pan entero, pues no es lo mismo.
Un murmullo de aprobación surgió entre los obreros al escuchar las resolutas palabras de Iliás; éste conocía bien la solución al problema, puesto que lo había aprendido en el Egipto, patria de ingeniosos geómetras, donde el problema de las fracciones con resultado menor de la unidad se enseñaba a los niños pequeños, siendo éstos capaces de resolver con gran soltura éste y otros enigmas de la ciencia numérica. Así pues, explicó Iliás:
-Señores, ésta es mi propuesta: de los diez hombres, perciban siete de ellos, cada uno, dos tercios de pan, un quinto de pan y un trigésimo de pan; perciban los tres hombres restantes dos fragmentos de un tercio de pan cada fragmento, un quinto de pan y un trigésimo de pan, pues no hay partición más justa y equilibrada.
Tembló Nasur. Tamaños cálculos excedían con mucho su capacidad para el cálculo, pues los babilonios, pese a disponer de un original sistema para determinar las medidas de las constelaciones, son incapaces de comprender las cosas menudas y sencillas; por eso dice el proverbio: "el sabio dominará las estrellas, pero se consternará al contar los latidos de su corazón".
Nasur trató de discutir la solución aportada por Iliás. Dibujó una y otra vez panes y hombres en la harina extendida sobre el hintero, y al cabo, no hallando mejor solución que la propuesta, no le cupo sino admitir que había llegado la hora de la embriaguez. Confiaba torpemente el panadero en confundir a su calculador enemigo en esa hora, y no le faltaba odio hacia él, pues veía tanto más amenazado su prestigio cuanto más ínfima era la categoría de su oponente.
Mandó Nasur a la bella Adlila que trajese vino de palma y libaron los hombres, sentados en el enharinado suelo del obrador. Mas el panadero, confundido su magín por las prisas a las que le llevaba el negocio, bebió sin guardar el compás con los otros hombres y turbóse al punto. La bella Adlila servía el vino de palma, inclinada en aquel instante a fin de atender el vaso de Iliás, quien en ese momento trazaba escabroso dibujo sobre los restos de harina del suelo; lo vio la hermosa mujer y contuvo la pícara risa que quería salirle del pecho; advirtió este extremo Iliás y, con el dedo retestinado por el blanco polvo, trazó una línea sobre el pecho de la escanciadora, fingió ésta enfado e hizo divertido mohín de reproche, mas con apenas finta de rechazo, con lo que derramado el vino sobre el descamisado pecho de Iliás, cruzáronse entrambas miradas y seguidamente las posaron en el panadero, quién no daba muestras de vida, pese a tener los ojos abiertos. Entendieron todos o casi todos; la bella inclinóse y lamió el vino del bello pecho de Iliás; comprendieron todos esta vez, excepto el aturdido panadero; alzóse Iliás y con él Adlila; abrazóla el albañil con venéreo afecto que la bella no repudió, tendióla en el hintero, desnudóse y desnudóla, cernió sobre ella harina, el maestro albañil hisopeola con el vino de palma y todos los obreros comenzaron a amasar a la bella, quien gemía de gozo cimbreándose como nadadora culebra.
-¡Adlila! -gritó el obnubilado Nasur- ¿qué haces, esposa mía?
-¡Intento convencer a estos hombres para el buen fin y la prosperidad de tu negocio, esposo mío!
-¡Ah! ¡Que me place! -declaró el ciervo- ¡sirve entonces más vino, mujer!
-¡Sírvelo tú! -contestó ella -yo seguiré en lo mío, pues tengo casi convencidos a éstos!
Una vez hubo pronunciado estas palabras, y acaso por virtud de secreta caricia, Adlila profirió un rugido que casi hizo temblar al obrador, pues como la leona que entra en el corral y regurgita temible sonido para aterrorizar al indefenso ternero, así la mujer del panadero bramaba presa de confusos gozos, a los que se sumaban los de los obreros, siendo todo griterío, rebullicio, zarabanda y tararira como jamás se vio en casa alguna.
Iba cayendo la tarde. La casa del panadero se encontraba en el centro de la ciudad, y por tanto considerablemente alejada de la Puerta del Sol, ante la que se encontraban los embarcaderos de los comerciantes. Hacia aquellas horas era cuando llegaban las barcas de los pescadores, labradores, ganaderos y peleteros que cuales escudos flotantes de piel, fresno y brea, arribaban a los puertos, temerosos de la noche. El enjambre de hombres, mujeres, animales y niños engendraba, como es de su natural, una barahúnda de gritos, órdenes, juramentos y balidos, que se podían escuchar desde cualquier parte de la ciudad. Pues bien, el clamor que desde la tahona de Nasur provenía, sobreponíase al de los embarcaderos, y tanto, que fueron llamados a escándalo los vecinos del panadero, más luego los serenos que a la sazón prendían las farolas del alumbrado público, más por último los guardias bastoneros, con lo que dieron obreros, contratista, panadero y mujer, entre las rejas de la sagena que el pueblo llamaba con ironía La Silenciosa, por ser infeliz destino de alborotadores, beodos y locos.
Al día siguiente celebrose juicio común sobre los prisioneros, porque común había sido tanto la fuente del delito como la ejecución del mismo. Y es por ello, caro lector, que por cumplir la promesa que en un principio te hice, a saber, que esta historia debería servirte para provecho de tu alma y protección de tus bienes, inserto en este punto la sabia sentencia judicial con la que concluyó el asunto:
"Probados y tenidos por ciertos los hechos que motivaron la presente vista, y razonando que no es falta la astucia ni la embriaguez, pero sí el uso de las sagradas costumbres para propósito distinto del convenido, condeno al llamado Iliás, de profesión albañil, al maestro de obras y al resto de los obreros, a levantar el obrador preciso sin contraprestación alguna, salvo un pan entero de acemite a cada uno, pues no han de penar las mujeres e hijos por la mala cabeza de sus maridos.
Probados y tenidos por ciertos los hechos que motivaron la presente vista, y razonando que si ley distinta rige en los miembros que en el espíritu, debe aplicarse el castigo conforme a la ley vencedora, condeno a la llamada Adlila a servir de prostituta sagrada en el templo de Istar dieciséis días al mes, durante doce meses, sin contraprestación alguna, pues si las inexpertas jóvenes babilonias, conforme a los usos y costumbres de nuestra patria, así lo hacen para congraciarse con la diosa antes de casarse, no poco provecho obtendrán los devotos gracias a la impudencia de esta atolondrada mujer.
Probados y tenidos por ciertos los hechos que motivaron la presente vista, y razonando que la habilidad en los negocios no requiere de falsedad, ni en los términos en que se exponen ni en las condiciones en que se resuelven, condeno al llamado Nasur, de profesión panadero, a suministrar los panes prometidos a palacio, en las fechas y período requeridos, sin contraprestación alguna por parte de la Real Intendencia, por cuanto mintió a los obreros, siendo éstos el sustento primero de nuestra patria y nuestra religión; de nuestra patria, porque de sus obras y productos se nutre nuestro glorioso ejército para sujetar las fronteras y aun expandirlas; de nuestra religión, porque de nada aprovecharía a los dioses así la ausencia de devotos como la carencia de templos edificados. Por último, sea confiscado el obrador al término del excepcional encargo realizado por el Intendente Real y derrúyase luego sin que quede ladrillo sobre ladrillo, allánese todo, siémbrese de sal y colóquese una tabla visible a la vista de todos en la que pueda leerse: "si en tu negocio mientes un día, la mentira te aprovechará dos; mas si mientes siempre, perderás todo provecho".

Cúmplase".

José Hermida, España © 1997


José Hermida es periodista y escritor. Hasta el momento ha publicado cuatro ensayos sobre temas económicos y un libro de viajes. Durante los últimos 25 años ha vivido en Madrid, pero desde hace nueve meses se ha trasladado a un pequeño pueblo de sesenta habitantes donde, gracias a Internet, puede seguir desempeñando su trabajo como articulista y asesor de dos publicaciones económicas españolas, a la vez que dispone de más tiempo para escribir narrativa.
El cuento que aquí se presenta forma parte de una serie de cuatro narraciones, cada una de las cuales se presenta en un lenguaje distinto, como resultado de la búsqueda de pertinencia entre el tema y la forma de expresión.
Lo que el autor nos dijo sobre el cuento:
"Escándalo en Babilonia" está basado en dos anécdotas referidas por Herodoto en sus "Historias": el curioso sistema utilizado por los babilonios para tomar decisiones correctas y la extravagante costumbre de la prostitución sagrada. Ambos usos resultan desconcertantes si tenemos en cuenta que el puritanismo religioso de los babilonios, basado en el examen de conciencia, era muy estricto. Esa disfuncion social y moral resultaba muy interesante como propuesta, en la medida en que nos remite de forma singular al comportamiento de amplios sectores de nuestra sociedad occidental. El lenguaje utilizado para la narración remeda los textos didácticos característicos de finales del siglo XVIII y que habiéndose extendido hasta finales del siglo XIX, constituían un tipo de literatura que hoy se encuentra totalmente en desuso, pero que convenía al contexto del cuento. El entretenimiento matemático que figura en esta narración es ciertamente de origen egipcio y tiene una antigüedad de 3.000 años. Las descripciones de los muelles de la Puerta del Sol, los plazos de entrega de los panes y las piadosas procesiones de Semana Santa se deben a la febril imaginación del autor, toda vez que están basadas en informaciones arqueológicas y en pasajeras observaciones del mismo Herodoto.

lunes, 19 de julio de 2010

Sobre mediación familiar en la Comunidad de Madrid

Estamos tratando de hacer un compendio de todas las leyes que se han aprobado sobre mediación para ponerla en internet para vuestra disposición. Como encontremos un enlace para descargar la Ley sobre Mediación Familiar en la Comunidad de Madrid pensemos que seria de utilidad el copiar la noticia con el enlace para descargar el documento ya que Madrid es un lugar que tiene muchos lectores en este blogg y se trata de una Ley que lleva poco tiempo en vigor por lo que quizás no sea tan conocida o fácil de encontrar publicada como las de otras comunidades autónomas.


La Ley de Mediación Familiar de la Comunidad de Madrid, publicada en el BOCM, con fecha 5 de marzo de 2007, “regula los requisitos que deben reunir los mediadores profesionales que realicen su actividad en la Comunidad de Madrid, su inscripción en el Registro de Mediadores Familiares y las normas básicas que rigen el procedimiento de mediación familiar” en esta comunidad. Los colegios profesionales son los encargados de registrar y actualizar a los profesionales, pero en un futuro se pretende establecer los criterios formativos que debe cumplir un mediador que desee registrarse en el mismo colegio. También se aprobó la creación del registro de mediadores del Colegio Oficial de Psicólogos donde se podrán registrar los colegiados en la correspondiente base de datos.
Desde hace tiempo, la familia está experimentando importantes cambios y transformaciones en un contexto sin poderse librar de los conflictos, por ello desde la mediación se plantea la resolución de los mismos desde métodos no contenciosos. Se les ofrece a las familias la posibilidad de llegar a resolver sus conflictos de manera pacífica intentando que las mismas personas lleguen a un acuerdo. Por tanto la mediación se presenta como un método alternativo para la resolución de conflictos, por ello surge la necesidad de contar con profesionales que se dediquen a este ámbito. Por eso se ofrece en la Comunidad de Madrid un programa formativo en base a una metodología teórico-práctica, en un espacio de entrenamiento en mediación, donde se trabaja con la integración de las técnicas y con las estrategias de mediación para el manejo de conflictos, trabajando siempre con casos reales.
Como bien se indica en la citada ley, la familia esta viéndose afectada por una serie de cambios que a menudo no es capaz de asimilar: divorcios, separaciones, peleas familiares… Por tanto, a pesar de los cambios, los conflictos siguen siendo una de las principales características de las familias, por ello resolver de manera adecuada los mismos es una tarea que deben realizar las familias. La disfuncionalidad de una familia no viene dada por la aparición de conflictos, ya que estos son normales, sino en la manera de solucionar los mismos. Por eso surge la necesidad en las familias del mediador para resolver de manera adecuada los conflictos pudiendo llegar a un acuerdo. Pero estos conflictos pueden ser de muchos tipos por lo que es tema muy amplio. Así que el mediador será el encargado de dar las herramientas necesarias a ambas partes, para llegar a un acuerdo.
No se trata de solucionar la vida a la gente, sino de dar la ayuda necesaria para que ellos mismos sean capaces de solventar sus problemas y llegar a un acuerdo. Por todo esto y ante la necesidad de la figura del mediador se ve necesaria la realización de cursos para formar a los futuros mediadores. La ley indicada afecta a la Comunidad de Madrid pero esta formación no se imparte solo en dicha comunidad, en la Universidad de Valencia, se ofrecen cursos de postgrado sobre mediación familiar, ya que ante la aparición de la figura del mediador las universidades se ponen en marcha para formar a los mismos, y no solo de manera teórica sino también de manera práctica. Se realizan talleres con casos reales, para que los alumnos adquieran todo lo necesario para este trabajo. Y por último, solo decir que en dicha ley se presenta la figura del mediador como un ámbito exclusivo del psicólogo, pero los educadores sociales también pueden trabajar como mediadores en los centros correspondientes.

"Legislación sobre mediación familiar"


Juan José Marín López , y Rocío López González
Ed. Tecnos
176 páginas
ISBN: 8430947035 ISBN-13: 9788430947034
(junio/2008)
Precio 20,5€


Nos a parecido oportuno empezar con la bibliografía sobre la mediación con este pequeño y económico libro que recoge lo legislado sobre mediación familiar ya que nos parece oportuno fijar el marco legal que debemos manejar, esperamos en próximos posts poder aportar legislación más especifica sobre mediación intercultural, pero no olvidemos que el matiz intercultural no debe hacernos olvidar que la gente con la que tratamos forma tambien parte de los ámbitos de convivencia comunes en los que puede ser aplicable la mediación convencional.
La Editorial Tecnos nos ofrece a buen precio manuales prácticos de legislación con una tapa semiplastificada que los hacen especialmente útiles para manejarlos y llevarlos allí donde los necesitemos, una de los libros que ofrece es este sobre las leyes de mediación familiar.
Esta segunda edición recoge el «documento fundacional» de la mediación familiar en Europa, constituido por la Recomendación n.º R (98) 1, sobre Mediación Familiar, aprobada por el Comité de Ministros del Consejo de Europa el 21 de enero de 1998. También se incluye una traducción española de la Declaración de Motivos que acompaña a dicha Recomendación, que tanta influencia ha desplegado en las disposiciones nacionales sobre la materia. Además, se reproduce la Directiva 2008/52/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 21 de mayo de 2008, sobre mediación en asuntos civiles y mercantiles. Hasta la fecha, han ido dictando leyes propias sobre mediación familiar las Comunidades Autónomas de Cataluña, Galicia, Comunidad Valenciana, Canarias, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Islas Baleares, Madrid, Asturias y País Vasco. Con todo, están pendientes de aprobación la normativa estatal sobre mediación familiar anunciada por la Disposición Final 3.ª de la Ley 15/2005, de 8 de julio, de modificación del Código Civil y de la Ley de Enjuiciamiento Civil en materia de separación y divorcio, y, en el ámbito comunitario, la Directiva del Parlamento Europeo y del Consejo sobre ciertos aspectos de la mediación en asuntos civiles y mercantiles, cuya Propuesta aparece aquí recogida. El presente volumen, profusamente concordado y anotado, se completa con las disposiciones generales, sustantivas y procesales, reguladoras de las crisis familiares. Sus principales destinatarios son quienes ejercen ...

Prólogo.. Abreviaturas.. I. LEGISLACIÓN EUROPEA.. § 1. Recomendación número R (98) 1, sobre Mediación Familiar, aprobada por el Comité de Ministros del Consejo de Europa el 21 de enero de 1998, en la 616.ª reunión de los Delegados de los Ministros, acompañada de su Exposición de Motivos.. § 2. Propuesta de Directiva del Parlamento Europeo y del Consejo sobre ciertos aspectos de la mediación en asuntos civiles y mercantiles [COM (2004) 718 final, de 22 de octubre de 2004].. II. LEGISLACIÓN ESTATAL. § 3. Código Civil, de 24 de julio de 1889.. § 4. Ley 1/2000, de 7 de enero, de Enjuiciamiento Civil (BOE n.º 7, de 8 de enero de 2000; corrección de errores en BOE n.º 90, de 14 de abril).. § 5. Ley 15/2005, de 8 de julio, por la que se modifican el Código Civil y la Ley de Enjuiciamiento Civil en materia de separación y divorcio (BOE n.º 163, de 9 de julio de 2005).. III. LEGISLACIÓN AUTONÓMICA. A) CATALUÑA.. § 6. Ley 9/1998, de 15 de julio, del Código de Familia de Cataluña (DOGC n.º 2.687, de 23 de julio de 1998; BOE n.º 198, de 19 de agosto).. § 7. Ley 1/2001, de 15 de marzo, de Mediación Familiar (DOGC n.º 3.355, de 26 de marzo de 2001, con corrección de errores en DOGC n.º 3.548, de 8 de enero de 2002; BOE n.º 91, de 16 de abril de 2001).. § 8. Decreto 139/2002, de 14 de mayo, por el que se aprueba el Reglamento de la Ley 1/2001, de 15 de marzo, de Mediación Familiar de Cataluña (DOGC n.º 3641, de 23 de mayo de 2002; correcciones de errores en DOGC n.º 3867, de 17 de abril de 2003, y n. (continúa...)

Mediación familiar según el Col.legi Oficial de Psicòlegs de la Comunitat Valenciana



Es importante tener en cuenta que:

Será requisito previo para estar inscrito en el Registro de Mediadores Familiares del Colegio de Psicólogos, que el colegiado se haya inscrito con anterioridad en el Registro de Mediación Familiar de la Comunitat Valenciana.

Registro de Mediadores Familiares del Col·legi Oficial de Psicòlegs de la Comunitat Valenciana.

Normativa:
  • Ley 7/2001 de 26 de noviembre, Reguladora de la Mediación Familiar en el ámbito de la Comunidad Valenciana.
  • DECRETO 41/2007, de 13 de abril, del Consell, por el que se desarrolla la Ley 7/2001 de 26 de noviembre, Reguladora de la Mediación Familiar en el ámbito de la Comunidad Valenciana.
  • Acuerdo de Junta de Gobierno de fecha 09/09/06 en relación con el Registro de Psicólogos Mediadores Familiares. 
Preguntas Frecuentes sobre el Registro de Mediadores Familiares de la Comunidad Valenciana
  1. ¿Cómo inscribirse en e registro? Presentación ante el Colegio de la resolución positiva sobre la inscripción en el Registro de Mediación Familiar de la Comunitat Valenciana. Además de la documentación que acredite su formación universitaria específica en materia de Mediación Familiar, de postgrado en los distintos niveles de experto, especialista o master.
  2. ¿Qué datos hay que comunicar al Colegio? Deberán permitir conocer el nombre, titulación, especialidad y lugar de ejercicio, debiendo de estar actualizado, y poner de manifiesto la siguientes datos:
  • Centro de trabajo. 
  • Dirección.
  • Correo electrónico.
  • Teléfono.
  • Ámbito territorial de actuación.
Registro de Mediadores Familiares de la Comunidad Valenciana.



Normativa.
  • Ley 7/2001 de 26 de noviembre, Reguladora de la Mediación Familiar en el ámbito de la Comunidad Valenciana.
  • DECRETO 41/2007, de 13 de abril, del Consell, por el que se desarrolla la Ley 7/2001 de 26 de noviembre, Reguladora de la Mediación Familiar en el ámbito de la Comunidad Valenciana. 
Información de interés:

¿Dónde dirigirse?
En los registros de los órganos administrativos a que se dirijan o ante cualquier órgano administrativo que pertenezca a la Administración General del Estado, a la de cualquier administración de las Comunidades Autónomas, o a la de alguna de las entidades que forman la Administración Local si, en este último caso, se hubiera suscrito el oportuno convenio, así como en las representaciones diplomáticas u oficinas consulares de España en el extranjero.
También en cualquier oficina de Correos. En este caso se deberá presentar en sobre abierto para que se pueda estampar el sello y la fecha en el impreso de solicitud y en la copia.
Y, preferentemente, en:
REGISTRO DE LA DIRECCIÓN TERRITORIAL DE JUSTICIA Y ADMINISTRACIONES PÚBLICAS - ALICANTE
RAMBLA MÉNDEZ NÚÑEZ, 41
03002 Alacant/Alicante
Tel: 012
REGISTRO DE LA DIRECCIÓN TERRITORIAL DE JUSTICIA Y ADMINISTRACIONES PÚBLICAS - CASTELLÓN
C/ MAJOR, 78
12001 Castelló de la Plana/Castellón de la Plana
Tel: 964358216
REGISTRO DE LA DIRECCIÓN TERRITORIAL DE JUSTICIA Y ADMINISTRACIONES PÚBLICAS
C/ SANTO CÁLIZ, 2
46001 Valencia
Tel: 012
¿Cuándo solicitarlo?
El plazo de presentación es durante todo el año.
Para más información pueden dirigirse a la normativa aplicable, o bien, a la información facilitada por la Conselleria de Justicia y Administraciones Públicas en la siguiente dirección:

miércoles, 14 de julio de 2010

Hiyab, corto de 8 minutos de Xavi Sala




En este corto el cineasta Xavi Sala trata el tema del hiyab desde una postura sorprendente. Nos cuanta la historia de una adolescentes, Fátima, que es convencida por su profesora en los pasillos del Instituto para que se quite el hiyab y no ser "la rara" de la clase. El final cuando Fátima es presentada a su nueva clase se deja de lado el discurso habitual de buenas intenciones y palabras políticamente correctas que solemos manejamos, la misma cosa nos sucede tambien más de una vez a nosotros, y nos caemos en la autentica realidad de la integración. Las miradas lo dicen todo y la de Fátima, sin que medie palabra nos dice muchas cosas que debemos tener muy presentes cuando hacemos mediación intercultural. Porque al final nosotros como mediadores tambien hacemos como la profesora del instituto que nos vamos y es Fatima la que se queda en clase, por lo tanto es el sujeto de la integración el que cuenta y nuestra actuación la debemos evaluar en función de las personas con las que trabajamos. 
Es Fátima la que se ha de quedar en la clase y la que tiene que ser evaluada por sus compañeros que no tendran en cuenta solo el tema de si se quita el hiyab en clase o no. Si tiene alguna justificación el trabajo que hacemos esta en función de lo que esta en el lugar en donde ha de convivir no si nuestro discurso es tal o cual, más correcto o menos correcto.

martes, 13 de julio de 2010

Algunas experiencias de mediación intercultural en la Comunitat Valenciana

En este post os ponemos algunos ejemplos sobre casos concretos de mediación intercultural en la Comunidad Valenciana que hemos sacado de lo aportado en una conferencia sobre mediación e interpretación de la Universitat Jaume I de Castelló por Saloua Laghrich
Como regla general nos debemos acostumbrar a tomar notas de las mediaciones que hacemos y a elaborar un informe de lo que se ha sucedido y de toda la información que hemos manejado en el proceso. Los ejemplos que damos a continuación han sido cambiados en lo que a nombres se refiere por cumplir con las reglas de privacidad que son de rigor en estos casos.


1. Hospital La Fe. Valencia

Se solicita por fax la mediación en el idioma francés para una persona de Mali ingresada en la planta de tetrapléjicos. El objetivo es dar apoyo al paciente y al equipo médico, especialmente a la psicóloga, ya que estaban desesperados porque el paciente no colaboraba, decía cosas incomprensibles, e insultaba a todo el personal sanitario. Querían ayudarle, pero les era imposible. El inmigrante, de 24 años, se llamaba Sulaimán y había sido futbolista en su país. Rechazaba a todos los cristianos (como llamaba él a los españoles), gritaba y escupía continuamente. Sulaimán hablaba castellano, el problema no era el lenguaje.
Antes de ver a Sulaimán, estuve hablando con la psicóloga, que me puso en antecedentes. Me contó que Sulaimán había sido víctima de una agresión física múltiple que le dejó en estado de tetraplejia en plenas navidades, el 22 de diciembre. La policía sospechaba de un grupo xenófobo. La psicóloga tenía especial interés en saber si yo conocía bien la cultura musulmana, porque Sulaimán era musulmán.
Me avisó sobre su estado para que no me impresionara al verlo, pues sólo movía la cabeza y tenía un agujero en el cuello.
Sulaimán rechazaba totalmente la autoridad, cualquiera que fuese: médicos, enfermeros, policías, etc. Tenía una fe absoluta en los espíritus oscuros y los demonios (djin), y así llamaba a todos los españoles que le rodeaban.
Muchos musulmanes creen en la existencia de estos seres que conviven con nosotros, y que se apoderan de nosotros algunas veces.
Yo tenía que mediar en una situación humanamente dramática y con un fondo religioso muy marcado. Sinceramente, hasta que no entré, no tenía ningún plan lógico de actuación. No había técnicas preestablecidas, pero sí pensé que la clave para llegar a esta persona y poder ayudarla era establecer un buen primer contacto, así que le propuse a la psicóloga que no me presentara como intérprete de la Conselleria. Otra autoridad no, por favor.
Lo primero que hice al entrar fue acercarme a Sulaimán, sentarme a sus pies y decirle “ssalumu alaikum wa rahmatu allh wa barakátuh”, que es el saludo en árabe entre musulmanes, sean árabes o no, y que significa: paz con vosotros, que la compasión y bendición de Allah os acompañen. Sulaimán se sorprendió mucho y sonrió. Me presenté diciéndole que me llamo Saloua, que soy musulmana de Marruecos, pensando que el hecho de ser musulmana era mucho más importante para Sulaimán que cualquiera de mis pertenencias culturales, porque podía significar para él cercanía y entendimiento. Hablamos mucho, le conté incluso que mi padre había sido un imám en una mezquita, sabía el Corán de memoria y presidía los rezos. Mientras yo estaba intentando tranquilizarle y crear un clima positivo que facilitara la comunicación, por dentro me sentía muy mal, esperando un grito o un escupitajo en cualquier momento, pero no fue así. Le dije a Sulaimán que yo era profesora de árabe, y que de vez en cuando acudía a los sitios cuando los españoles me llamaban para ayudar a los musulmanes (para que me sintiera más cercana). En un momento dado me pidió un pañuelo para poder escupir, se lo acerqué a la boca, y seguimos charlando, pero esta vez en castellano. La psicóloga le explicó que tenía que contestar a las preguntas de los agentes de policía y tomarse la medicación que antes rechazaba.
En el momento en que Sulaimán me pidió un pañuelo, me relajé por dentro y pensé que ya me había aceptado, lo que me ayudó y me motivó para seguir. La psicóloga se marchó para darle un espacio a Sulaimán; un espacio para la comunicación y el desahogo lógico vista su situación de desamparo. Sulaimán, a pesar de la situación dramática en la que se encontraba, era una persona alegre y muy viva, nos reímos mucho con los djin, y yo le dije que creía en ellos, pero pensaba que no eran las personas del hospital, sino los que le habían atacado, que los españoles del hospital sólo querían ayudarle, y que por eso me habían llamado. Le juré en nombre de Allah que era verdad todo lo que yo le decía, llegando con él a un pequeño acuerdo con el fin de ayudarle y facilitar el trabajo al equipo médico: regalarle el Corán e ir a verle una vez cada 15 días para leerle algunos versículos y charlar, con la condición de que tratara mejor a los españoles que le cuidaban y les hiciera caso.
Me prometió que iba a hablar con la policía, aunque no se acordaba de todas las caras de los agresores.
Con una mediación, dos o tres, no salvamos a nadie, ni resolvemos un problema como el de Sulaimán, pero si facilitamos un buen clima de trabajo al equipo médico no sólo estamos ayudando a esta parte, sino y sobre todo a Sulaimán. Pasé con él unos momentos muy agradables y espero que él también. Lo único que le queda es sobrellevar la crudeza de su situación lo mejor posible. ¿Quién no estaría alterado y desesperado en esta situación?
No sólo la religiosidad de Sulaimán hizo que pensara que eran espíritus malignos y oscuros los que le rodeaban, sino su ingenuidad, no entendía por qué algunos atacan a otros sin ningún motivo.
Me acuerdo que la psicóloga le dijo: “A ver si nos llevamos mejor a partir de ahora Sulaimán”; y él le contestó: “sí señora, pero no estoy loco, los djin existen”.
La mediación intercultural aquí se centró en acercarse y acompañar a esta persona a partir de sus creencias y vivencias, para poder establecer un rapport (relación, lazo) de confianza, y posibilitar el trabajo del equipo en el hospital. Salí de la habitación de Sulaimán agotada emocionalmente, y sobre todo pensando en el daño irreparable que causan los fanáticos.

2. Hospital Maternal La Fe. Valencia

A petición de la trabajadora social, acudí al hospital como mediadora intercultural. La historia de Nadia, una mujer marroquí, es ésta:
Una mañana del mes de agosto, Nadia es ingresada en el hospital con dolores de parto (contracciones), iba acompañada por un español que se presentó como amigo y se fue. Antes de que le fuera practicada la cesárea, Nadia explica al equipo médico y a la trabajadora social en un castellano básico que no quiere ver al niño y que busquen una familia para él.
El motivo de nuestra actuación fue en principio ayudar a la técnico de servicios sociales de la sección del menor a abrir el expediente de adopción o acogimiento temporal del recién nacido, y a la trabajadora social del hospital a recabar datos personales de Nadia y redactar su informe. Mi trabajo consistiría en traducir oralmente toda la información dada por las tres partes, es decir, iba a actuar como intérprete de árabe y castellano.
Se solicitó nuestra mediación a los dos días del nacimiento del niño, la madre se negaba a verlo.
Me acuerdo que entré triste a la habitación de la joven marroquí, porque la situación de separación entre la madre y el niño desde el nacimiento me afectaba mucho. Nos presentó la trabajadora social y se marchó, para facilitar un espacio humano antes de entrar en el trabajo puramente técnico.
Después de darme un fuerte abrazo, Nadia empezó a llorar escondiendo la cara, intenté calmarla diciéndole que no estaba sola, que todos queríamos ayudarla. Es frecuente entre árabes llamarnos hermanos y hermanas, Nadia no paraba de llamarme hermana, y la verdad es que cada vez que lo hacía yo me sentía en la obligación de ayudarla, podía haber sido mi hermana pequeña, tenía 22 años. Aunque yo sabía que era intérprete y no hermana de Nadia, intuía que había una historia dramática detrás de esta supuesta decisión de abandonar a su hijo, así que le pregunté a Nadia basándome en la confianza que le transmitía yo al ser de su propia cultura y país: “¿por qué no quieres ver al niño?” Y me contestó: “porque no quiero conocerlo, si lo conozco no podré abandonarlo y regalarlo”, entonces entendí que los motivos eran económicos y de papeles, como se suele decir entre inmigrantes irregulares, y no otros.
Nadia estaba de forma irregular en España, no quería decir quién era el padre, porque la abandonó cuando se quedó embarazada, y no tenía medios para educar a su hijo y facilitarle una vida digna, por eso decidió no verle desde el principio.
Le pedí a Nadia que se tranquilizara porque había una solución real para su problema, y que no tenía que dar al niño en adopción, le dejé claro que yo como intérprete no podía resolver su problema, y que necesitaba hablar con la trabajadora social del hospital y la técnico de la sección del menor de Bienestar Social. Hablé con las dos. La reacción de la funcionaria de la Conselleria fue inmediata y muy espontánea, dijo: “yo no pinto nada aquí, esta mujer no quiere dar en adopción a su hijo, muchas gracias, y te toca a ti, refiriéndose a la trabajadora social, tramitarle un ingreso a un materno”.
Las funciones de cada una se iban delimitando y aclarando. Le pregunté a la trabajadora social si era posible ingresar a Nadia con su hijo en el centro materno infantil, ya que había un menor desamparado que necesitaba protección. Me dijo que sí, que necesitaba tiempo para hacer las gestiones administrativas y el informe social de Nadia, pero no entendía por qué la mujer se empeñaba en repetir que no quería ver a su hijo. Le dije que el único problema que yo detecté era la desinformación de la madre, que llevaba poco tiempo en España, no se relacionaba con gente española, y estaba segura que aquí era como en Marruecos: o la familia o el orfanato.
Lo único que yo deseaba en este momento era volver a la habitación de Nadia y comunicarle la noticia, ya sé que no se debe implicar un mediador, pero fue emocionante el abrazo que compartimos Nadia y yo. Cuando le trajeron a su hijo, me dijo que lo iba a llamar Saad, que significa “buen augurio” y “buena suerte”. Por cierto, tengo un hermano que se llama Saad.
La última fase de mi trabajo consistió en traducir toda la información necesaria para que la trabajadora social pudiera redactar el informe social, pero dentro de un ambiente no sólo relajado, sino festivo.
Valorando el trabajo en la reunión de equipo, la coordinadora del servicio me dijo que aunque yo no tenía que haber preguntado tantas cosas a Nadia, porque mi trabajo como mediadora no lo exigía, hice bien en indagar dado el resultado.
No sé si hice bien o mal, sólo sé que hay situaciones en que una persona debe implicarse, sea mediador o no.
El mediador tiene que ir más allá de lo verbalmente obvio. Dar información es ayudar a una persona a resolver sus problemas, dándole la opción de decidir.
Partir de cero en una actuación de un mediador es fundamental: no sé nada y pregunto.

3. Centro Penitenciario de Picassent. Valencia (Módulo Hospital). Marzo 2001

La trabajadora social del Centro penitenciario solicita nuestro apoyo desde la mediación intercultural y la interpretación, con el fin de facilitar el trabajo al equipo médico y a un interno de nacionalidad marroquí.
Youssef, de 19 años, estaba condenado por delito de robo con intimidación con arma blanca. Antes de seguir, tengo que decir que la trabajadora social puso especial interés humano en ayudar a Youssef. Creo que fue éste el motivo de la petición de mediación.
Mi trabajo se centró en hacer una entrevista en árabe al paciente con las indicaciones de los médicos y la trabajadora social, mediante un acercamiento humano muy cuidado. Mi papel fue de mediadora intercultural y no sólo de intérprete dado el estado mental en que se encontraba Youssef, quien sufría una pérdida de referencias, brotes psicóticos y falta de apoyo de familiares o amigos. Los profesionales del Centro necesitaban datos básicos familiares, sociales y todo lo que les pudiera servir para clarificar el diagnóstico del paciente con el fin de ayudarle a adaptarse mínimamente a la cárcel, y sobre todo a experimentar una mejoría, ya que su queja principal eran el dolor de cabeza y las alucinaciones.
Youssef había tenido algún intento de agresión a los funcionarios del Centro, pero en general sufría pánico.
En esta actuación nos trasladamos dos personas de nuestro servicio, una compañera psicóloga y yo.
Solicitamos a la trabajadora social que nuestra visita fuera sin barrera de seguridad, porque pensamos que no se puede crear un clima de confianza con barreras.
Me acuerdo que Youssef hablaba con dificultad, por el efecto de los tranquilizantes, pero habló mucho, me pidió que buscara a un familiar suyo en el barrio de Ruzafa en Valencia, que le trajera libros en árabe, sobre todo de las abluciones, que son el modo de lavarse de un musulmán antes de cada rezo. No parábamos de fumar, él, mi compañera y yo.
Mediar en la cárcel es muy duro, pero estábamos allí, y teníamos que hacerlo.
Decidimos entre mi compañera y yo que este chico necesitaba un apoyo continuado, y tener referencias culturales cercanas para poder sobrellevar la angustia que causa la privación del libertad.
Planteamos a la trabajadora social nuestro deseo de seguir visitando a Youssef una vez al mes, porque pensamos que tenía problemas añadidos a la falta de libertad, problemas de carácter referencial, y por lo tanto nuestro apoyo sería importante siempre y cuando el interno cumpliera los mínimos compromisos dentro del centro: como no negarse a tomar la medicación, intentar controlar sus impulsos agresivos y asistir a clases de castellano.
Con Youssef llegamos a un acuerdo: yo le iba a regalar unos cuadernos que explicaban cómo se hace la ablución (de mi época de profesora de árabe para españoles convertidos al Islam), le prometí que iba a buscar a su familiar comerciante en Ruzafa, y que cuando tuviera la carta redactada y vista por las autoridades del centro penitenciario, la entregaría al Consulado de Marruecos en Valencia, a cambio de cumplir las normas del centro. Desgraciadamente tuvimos que concluir e irnos.
Hasta que se decidió prescindir de nuestro servicio de Atención al Inmigrante, el 31 de diciembre del 2001, mi compañera y yo seguimos visitando a Youssef, sin barreras de seguridad.
Creo que desde la mediación intercultural hemos podido hacer una labor humana digna para el beneficio de las dos partes, nuestro servicio jurídico se implicó con el fin de ayudar a Youssef, utilizando los medios jurídicos a su alcance, pidiendo a su abogada de oficio que solicitara al Juez el cambio de condena por la expulsión, por supuesto después de hablarlo con Youssef.
Esta experiencia como mediadora intercultural hizo que yo conociera un poquito todo el entramado policial en el caso de una persona inmigrante sin documentos, que conociera la ley en los casos penales de delito menor de 6 años en España, y sobre todo, hizo que una persona pudiera estar con su familia.
La mediación empezó en marzo de 2001 y se truncó en diciembre de 2001, pero me informé y supe a través del familiar de Youssef y de la trabajadora social que el Juez había dictado orden de expulsión a cambio de la condena de prisión de 5 años y un día.
Tengo que resaltar aquí la mediación de mi compañera del servicio, ya que fue crucial, porque de forma clara y sencilla y utilizando el dibujo, le explicó a Youssef el funcionamiento del cerebro, y la enfermedad que padecía, ella habló con él con mucha sencillez y calidez, mientras yo iba traduciéndole lo más humana y correctamente posible.
Para finalizar, el trabajo con Youssef fue muy enriquecedor, y humanamente difícil de olvidar. Espero que esté ahora tranquilo con su familia en Casablanca.

La mediación intercultural del Grupo Triangulo

La definición que dan los mediadores interculturales del Grupo Triángulo es una de las más cercanas a la experiencia real en la que se desenvuelva la mediación intercultural en España por lo que nos parece que es un buen punto de inicio para utilizarla en cursillos introductorios sobre mediación intercultural.

1. ¿Qué entendemos por mediación intercultural?    
La mediación intercultural es un proceso que contribuye a mejorar la comunicación, la relación y la integración intercultural entre personas o grupos presentes en un territorio, y pertenecientes a una o varias culturas. Esta labor se lleva a cabo mediante una  intervenciónque abarca tres aspectos fundamentales: facilitar la comunicación, fomentar la cohesión social y promover la autonomía e inserción social de las minorías en orden a construir un nuevo marco común de convivencia.
 
2. ¿Cuál es el contexto en el que surge y actúa la mediación intercultural?  
La ignorancia sobre el mundo propio y el del otro y sobre las formas de percibir, entender, sentir y actuar es terreno fértil para que aparezcan prejuicios, estereotipos, discriminación y racismo. Este desconocimiento separa a las personas, crea o mantiene la distancia entre ellas y dificulta que se pueda construir conjuntamente. En este contexto, surge la necesidad de la mediación intercultural. Una necesidad que se ve acentuada en el mundo actual, cuando a la diversidad cultural se unen la desigualdad social, económica y la diferencia sexual.
La finalidad es construir una sociedad intercultural, es decir, transformar la comunicación y la relación entre personas y grupos de culturas diversas para que sea posible, en palabras de Bruno Ducoli, “unir sin confundir y distinguir sin separar”.
 
3. El mediador intercultural  
El mediador intercultural actúa de puente entre los actores con dificultades de comunicación y/o conflictos de convivencia por algunas de las siguientes causas:  
  • Desconocimiento mutuo de los códigos de referencia cultural y de los procesos de relación intercultural.
  • Desconocimiento de los servicios que prestan las instituciones públicas y privadas y de sus vías de acceso.
  • Desconocimiento de la realidad social y cultural de las personas a las que se atiende, por parte de los agentes sociales.
  • Situaciones de desigualdad y discriminación (laboral, vivienda, salud, educación…).
  • Existencia de prejuicios y estereotipos en las relaciones entre personas y grupos culturalmente diversos.
  • Vulnerabilidad psico-social de personas y minorías inmersas en procesos de adaptación social y de cambio.
  • Desvaloración de los servicios y recursos de las propias comunidades de referencia.




4. En todas las comunidades se dan acciones mediadoras  

Históricamente, todas las comunidades han desarrollado acciones mediadoras en distintos ámbitos de su organización social. Estas acciones son una respuesta espontánea a las dificultades y conflictos anteriormente citados. Suelen realizarse entre personas del mismo origen cultural, que tienen confianza, y una relación de solidaridad, y no acostumbran a traspasar los límites de lo personal o familiar. Este tipo de mediaciones es fundamental como regulación “interna” de las relaciones sociales, útil en contextos puntuales y situaciones de emergencia.
Estas acciones tienen sus límites, y no deben confundirse con la mediación intercultural como recurso profesionalizado:
  • Se circunscriben al ámbito de las redes sociales del mediador/a.
  • Se centra en su propio marco de referencia cultural.
  • Tendencia de quien las realiza a posicionarse en favor de una de las partes.
  • Dificultad a la hora de interpretar adecuadamente las demandas personales o las propuestas de los profesionales.
  • Escasa disponibilidad de tiempo de las personas que las llevan a cabo, dado que es una acción voluntaria.
  • La complejidad de la estructura social actual y la existencia de políticas institucionales para regular la vida social.
Estas acciones mediadoras no deben oponerse a la mediación intercultural profesional. Son compatibles y deben coexistir y colaborar ya que tienen campos comunes y específicos de actuación.

5. Modalidades de mediación intercultural  

  • La Mediación «PREVENTIVA», que busca facilitar el acercamiento, la comunicación y la comprensión entre personas/grupos con códigos culturales diferentes.
  • La Mediación «REHABILITADORA», que interviene en la regulación y resolución de conflictos y tensiones interculturales.
  • La Mediación «TRANSFORMADORA», que supone la apertura de un proceso creador mediante el que superar las normas, costumbres y puntos de vista particulares, en situaciones de convivencia multicultural, para alcanzar nuevas normas y modos de relación compartidos.
En definitiva, la mediación es la intervención de una tercera parte, con capacidad para dar a conocer las claves, las representaciones culturales y sociales de los actores implicados, para superar situaciones de desconocimiento e incomunicación, conflicto de valores o intereses, o la existencia de diferencias o desigualdades.
La mediación intercultural, por tanto, permite explicitar el sentido, las lógicas y las representaciones de las culturas en contacto, de manera mutua, en un ambiente apropiado de comunicación y predisposición de ambas partes a la colaboración de una tercera, con el objetivo tanto de garantizar la igualdad de disfrute y de acceso a los recursos y servicios a los que tienen derecho, como de favorecer el conocimiento y la interrelación entre personas/grupos en orden a construir un marco común de convivencia.
La mediación intercultural comparte con otros tipos de mediación los siguientes principios:
  • Voluntariedad, co-protagonismo y legitimación de las partes.
  • Ayuda a las partes como finalidad central de la mediación.
  • No obligatoriedad para los participantes de acatar o aceptar las intervenciones que lleve a cabo el/la mediador/a.
  • Confianza de las partes en el mediador y en el procedimiento.
  • Flexibilidad, equidistancia e imparcialidad técnica del/la mediador/a.
  • Recontextualizar el conflicto o la situación, de tal manera que los involucrados se vean como co-partícipes en el proceso y en la solución.
6. Perfil de la figura mediadora intercultural  
Son profesionales:   
  • Con formación en conocimientos, habilidades y actitudes específicas en mediación intercultural: inmigración e interculturalidad, comunicación intercultural, interpretación lingüística y sociocultural, negociación y mediación para la prevención y resolución de conflictos culturales, ámbitos de intervención.
  • De preferencia, aunque no únicamente, son miembros de los colectivos de referencia
  • Con experiencia de participación social.
  • Con dominio de la lengua de la sociedad mayoritaria y de la lengua de la comunidad autónoma donde trabajan, así como de la propia lengua de origen y/o vehicular 
  • Polivalentes, con tendencia a la especialización.
  • Con una trayectoria personal de interculturalidad, es decir, que encuentran una articulación entre dos o más códigos culturales, en una búsqueda de compromisos y negociación interior
  • Con capacidades personales tales como flexibilidad, equilibrio emocional, humor, y habilidades para la interacción, para involucrarse y tomar distancia.
  • Que demuestran tener una formación equivalente en capacidades y conocimientos a un ciclo formativo de grado superior.
7. Funciones de la figura mediadora intercultural  
  • Facilitar la comunicación entre personas/grupos de culturas distintas.
  • Asesorar a los agentes sociales en su relación con los colectivos minoritarios en temas de interculturalidad, diversidad cultural (cultura, immigración), y relaciones intercomunitarias.
  • Asesorar a personas y colectivos minoritarios en su relación con la sociedad mayoritaria
  • Promover el acceso a los servicios y recursos públicos y privados.
  • Construir ciudadanía y acompañar activamente los procesos personales de integración.
  • Favorecer la participación social y comunitaria.
  • Todas estas funciones pueden desarrollarse en cualquier ámbito de intervención: educación, salud, trabajo, jurídico, social, comunitario…

Rasgos generales de la mediación intercultural

Durante los últimos tiempos la figura del mediador intercultural se ha estado generalizando en Europa, aunque los matices sobre la denominación de esta figura profesional son diversos: Por ejemplo se suelen denominar como “linkworkers” o trabajadores de enlace, en Inglaterra o Suecia; “mediadores lingüístico -culturales” o "interpretadores lingüísticos,  o más sencillamente como “mediadores culturales”, en otros muchos lugares entre ellos España. 
Los mediadores interculturales tienen como principal objetivo resolver cuestiones de tipo socio-jurídico, socio-laboral, sanitario, educativo desde el contexto del fenómenos de la interculturalidad, es evidente que todos los conflictos de nuestra sociedad no tienen como basa la diferencias de las culturas con la que nos encontramos pero si que los matices y la diferencias culturales son algo necesario para poder resolver de forma adecuada la cuestiones que se nos plantean cada día en una sociedad cada dia más intercultural como la nuestra.
En términos generales un mediador intercultural podría definirse como la persona “que ocupa un lugar estratégico en el ámbito social, que le permite a la vez recibir informaciones de carácter científico e institucional y transmitirlas de forma comprensible y eficaz al resto de la sociedad, que de otra manera o no recibirían las intervenciones o no estarían en condiciones de asumirlas, codificarlas y utilizarlas”. El mediador intercultural tiene por lo tanto la finalidad de ser un puente que acerque a personas que viven juntas pero que no comprenden del todo bien los puntos de vista y códigos de comportamiento del "otro". Y tambien cubre una función de "notario de la realidad intercultural" en el lugar en que realiza su actividad, porque la cultura es cambio y adaptación basandose en los parámetros y las respuestas culturales que están ha disposición de las personas. Es bueno tener esto siempre presente para que no caigamos en el error de creer que las respuestas culturales no pueden ser modificadas en función al nuevo contexto y la convivencia con otras culturas.
Si intentásemos dar una buena definición sobre la figura del mediador intercultural, deberíamos partir necesariamente de un punto de vista básico, como es que toda persona está dotada de una dignidad y que merece nuestro respeto, como tal persona y como ciudadano, sin importarnos la raza o su religión. Si tenemos en cuenta esta premisa el mediador intercultural sería la persona encargada de “ ayudar a los diferentes sectores de la comunidad a lograr un mayor conocimiento mutuo que facilite su participación para el logro de unos resultados educativos óptimos".
Las definiciones que hemos dado anteriormente pueden ser completadas por la que nos ofrece el profesor Giménez de una forma más académica pero bastante exacta en cuanto a su comprensión: “Entendemos por Mediación Intercultural – o mediación social en contextos pluriétnicos o multiculturales – como una modalidad de intervención de terceras partes, en y sobre situaciones sociales de multiculturalidad significativa, orientada hacia la consecución del reconocimiento del Otro y el acercamiento de las partes, la comunicación y comprensión mutua, el aprendizaje y desarrollo de la convivencia, la regulación de conflictos y la adecuación institucional, entre actores sociales o institucionales etnoculturalmente diferenciados”.

jueves, 8 de julio de 2010

Los diez pecados capitales de la escucha

1. Falta de interés sobre el tema.
Los mejores interlocutores son aquellos que saben mostrar interés real por lo que les exponen y no se limitan a áreas determinadas de interés. Gracias a ese interés logramos:

  • Elevar la autoestima del que nos habla.
  • Aprender de temas nuevos.
  • Disponer de más opciones para solucionar problemas.

2. Fijarse demasiado en el exterior y descuidar el contenido.
Los buenos escuchadores se fijan con atención en la forma de hablar de su interlocutor, su aspecto externo, su uso del lenguaje y otros rasgos particulares; pero no se quedan con eso. Ademas son capaces de ir mas allá, para captar el contenido global del mensaje. Es un error muy común el dejarse influir solo por lo aspectos externos, sin profundizar.
3. Interrumpir al que habla.
Es tan descortés "pisar" las ideas de la gente mientras habla como pisarles un pie. Un buen escuchador espera hasta que su interlocutor ha terminado, valora lo que ha dicho y responde después
¡Contenga sus impulsos hasta haber oído todo lo que tengan que decir!
4. Concentrarse en los detalles y perder lo principal.
Los que no saben escuchar se atienen solo a los hechos, sin identificar los conceptos que quieren trasmitir ¿Cuantas veces ha interpretado en sentido literal y entendido mal el mensaje?
5. Adaptarlo todo a una idea preconcebida.
Con frecuencia solemos oír las cosas no como son, sino como nos gustaría que fueran. Tendemos a adoptar los mensajes para que no sean discordantes con nuestra forma personal de ver las cosas.
6. Mostrar una actitud corporal pasiva.
Para escuchar bien no es suficiente tener "los oídos abiertos"; hay que escuchar con todos los sentidos. Nuestra postura de interés nos ayudara a concentrarnos, e inconscientemente demostrara a nuestro interlocutor que estamos abiertos a lo que nos expone.
7. Crear o tolerar distracciones.
Nuestro interlocutor se merece con exclusividad toda nuestra atención durante el tiempo que dure su comunicación. El permitir interrupciones, ademas de una descortesía, nos hace distraer la atención y perder detalles del mensaje.
8. Prescindir de escuchar lo que resulte difícil.
Ante conceptos y vocabulario con el que no estamos familiarizados, tendemos a evadirnos y a no intentar siquiera comprender el mensaje global. Es necesario hacer un esfuerzo adicional y tratar de captar al menos lo principal. Ademas de un ejercicio mental muy provechoso, permite reconocer nuestros conocimientos en áreas desconocidas.
9. Permitir que las emociones bloqueen el mensaje.
Las comunicaciones relativas a temas que suscitan emociones tienen el peligro de perder parte de su contenido si quien las escucha y las interpreta se deja aturdir por su reacción sentimental. Practicar cierto control emocional cuando estamos hacia otra persona que nos habla nos permitirá contar con más alternativas de respuesta, y probablemente más acertadas.
10. "Ensoñaciones".
Las personas que saben escuchar aprovechan la facultad humana que nos permite pensar mucho más rápido que hablar. Con ello podemos evaluar, repasar, resumir, anticipar el mensaje que nos están trasmitiendo, aún antes de que terminen. Practicando esta habilidad, se pueden diferenciar el objetivo del mensaje de los detalles accesorios, captar contenidos no verbales  anticipar posibles respuestas.

Principales ventajas y desventajas de aplicar la mediación


Ventajas (Martínez de Murguia, 1999)
  1. Aplicada de manera general y sistemática puede reducir mucho la carga de asuntos que estan a la espera de ser resueltos por los tribunales de justicia.
  2. Implica tambien un importante ahorro de tiempo y de dinero con respecto a la alternativa judicial.
  3. Al contrario de lo que ocurre generalmente con los tribunales de justicia, el proceso de mediación es privado, y la información que se utiliza, asi como los arreglos a los que se llega, es materia confidencial, lo que puede resultar altamente atractivo para muchas personas.
  4. La naturaleza de la técnica de mediación basada en el dialogo, la comunicación y la importancia de la relación que mantienen las partes, favorece que la resolución del conflicto no suponga la ruptura de la relación y alienta a los participantes a mantener relaciones satisfactorias en el futuro.
  5. Otra importante ventaja de la mediación es la flexibilidad: las partes interesadas acuden voluntariamente a la mediación para establecer sus exigencias y condiciones, deciden que es aceptable para ellas y definen tambien por si mismas la solución, de manera que no existen soluciones previstas de antemano ni se aprueba nada que las partes no acuerden por consenso. En definitiva, el resultado no tiene ninguna de las rigideces de una sentencia judicial.
  6. Las soluciones acordadas pretenden que la relación se mantenga y sea de largo alcance: que no solo resuelvan el conflicto en lo inmediato, sino que ofrezcan un esquema aceptable de relación a largo plazo.


Desventajas (Martínez de Murguia, 1999)
  1. Algunos expertos señalan que el mayor inconveniente de esta técnica es que no tiene en cuenta la diferencia de poder que puede existir entre las partes, y que por tanto puede inducir a la firma de acuerdos injustos para las partes más débiles o desfavorecidas, algo que en principio no ocurriría en un tribunal de justicia.
  2. Existe ademas un desacuerdo sobre la conveniencia de que se imponga de manera obligatoria el recurso  a la mediación como paso previo al procedimiento judicial. Según muchos expertos, el carácter voluntario es decisivo para el buen éxito de la mediación; ademas su obligatoriedad como paso previo cerraría el acceso a la justicia a quienes no quieran pasar por la mediación.
  3. Un problema que atañe en particular a los Estados Unidos es que debido a que no se dictan sentencias en los casos de mediación, no se sientan precedentes jurídicos y no se desarrolla jurisprudencia. El resultado es que ello impide que se legisle con la rapidez necesaria para lograr un ordenamiento jurídico flexible, es decir que el buen éxito de la mediación podría afectar al sistema de impartición de justicia, haciendolo más obsoleto e inadecuado para las nuevas situaciones.
  4. Los infractores de la ley que se someten a la mediación pueden quedar impunes. Este es un problema que tiene que ver con la mediación entre víctima y ofensor, aunque tambien puede suceder en la mediación familiar si uno de los cónyuges a golpeado y maltratado al otro. El mediador seria, en este caso, responsable de evirar que se llegue a acuerdos sobre conflictos que no son mediables.


Errores más frecuentes en los mediadores

  • Hacer demasiadas preguntas.
  • No respetar silencios.
  • Preguntar excesivamente por el "por qué" de las cosas o afirmaciones o hechos.
  • Mostrar disgusto o discutir con algunas de las partes o con ambas.
  • Imponer la mediación.
  • Imponer una solución.
  • Imponer un ritmo determinado.
  • Juzgar lo que dicen o hacen.
  • Aconsejar.
  • Forzar o acelerar el desenlace o el acuerdo.
  • Forzar la reconciliación.
  • Amenazar a las partes.
  • Abuso de autoridad moral o real.
  • Utilizar un lenguaje muy técnico.
  • Dar muestras de cansancio.
  • Querer demostrar que sabe mucho del asunto tratado.

Papel del mediador



  1. Abridor de canales de comunicación que inicien o faciliten una mejora en la comunicación entre las partes que ya están hablando.
  2. Legitimador que ayuda a que las partes reconozcan el derecho que los otros tienen a estar presentes en la negociación.
  3. Facilitador del proceso que proporciona el procedimiento y dirige y facilita el camino que ha de llevar a las partes a la solución. Entrenador que educa a los negociadores novatos, sin habilidades y preparación, en el proceso de negociación.
  4. Creador de recursos que ayuda dando información técnica, poniendo en contacto, con el objeto de lograr un acuerdo, con expertos relevantes externos, y sugiriendo ideas que añaden una nueva dimensión a la negociación.
  5. Explorador del problema, ayudando a la gente a ver las cuestiones desde distintos puntos de vista, asistiendo en la definición de los asuntos y de los intereses básicos.
  6. Agente de la realidad que ayuda a construir y aplicar un acuerdo razonable, corrigiendo y haciendo razonar a las partes con objetivos no realistas.
  7. Chivo expiatorio que esta dispuesto a asumir parte de la culpa de haber tomado una decisión que no sea popular pero que, sin embargo las dos partes están dispuestas a adoptar. Así los negociadores mantienen su integridad y pueden justificarse ante sus representados.
  8. Líder que adopta iniciativas para hacer avanzar la negociación.


(En Alzate R., según Moore, 1996)

miércoles, 7 de julio de 2010

Definición de mediación obligatoria


mediación obligatoria. Denominación de este proceso de resolución alternativa de disputas en aquellos casos en que aparece como una instancia impuesta por la ley, con carácter previo a la iniciación de cualquier proceso judicial. No es incompatible con el carácter voluntario de la mediación teniendo en cuenta que lo que se ordena es la concurrencia a una reunión de mediación, cuyo objetivo es logra el avenimiento, pero no existe obligatoriedad de concurrir a las reuniones posteriores ni, por supuesto, de llegar a un acuerdo. Suele utilizarse en aquellos países en los cuales se intenta descongestionar la actividad de los tribunales de justicia. Sin embargo, existen características del sistema judicial (carácter conservador, adversarial y desapoderamiento de los justiciables) que dificultan la implantación de estos métodos con carácter obligatorio o como procedimiento anexo a los tribunales.

Pautas de comportamiento en mediación

Las pautas de comportamiento que los mediadores y las partes deben contemplar incluyen una diversidad de conductas y actitudes, entre ellas:

  • El modo en el que se examinaran los antecedentes del problema.
  • El orden en el que los litigantes haran uso de la palabra.
  • Como se resolveran las discrepancias acerca de los datos.
  • El marco temporal de la sesión o las sesiones.
  • Los acuerdos acerca de los observadores y testigos.
  • Las normas que impiden atribuir motivos o realizar acusaciones calumniosas.
  • Las reglas acerca de las interrrupciones.
  • La determinación de intervalos sabiendo que la duración media del proceso mediador dependera de la naturaleza y complejidad de los asuntos a tratar. Algunas normativas ponen limite de duración al proceso mediador, siendo habitual un máximo de 3 meses desde el inicio de las sesiones.
  • Los procedimientos para organizar las reuniones parciales o privadas.
  • El comienzo como una reafirmación de la confidencialidad.
  • La escucha activa, la información escrita y la realización de preguntas.
  • La verificación de lo que se escucha, la utilización del parafraseo o la reformulación.
  • La sintesis de lo que se va escuchando y proponer alguna solución para ver como es aceptada.
  • La reiteración de la confidencialidad de lo anterior.
Las pautas de comportamiento podran ser designadas por el mediador o los litigantes. Si las define el mediador, las partes pueden coincidir en sus formas de aplicación. Si el mediador sugiere reglas, debe evitar cuidadosamente la creación de una dinámica en la que el mismo sea la autoridad y las partes se conviertan en subditos obedientes. Las normas deberan ser convenidas por consenso si es que se quiere que resulten eficaces.

Esto es una parte y tiene unos objetivos limitados. Simplemente hay que tratar de que las partes se sienten en la mesa y hablen y acepten las reglas.
Es muy importante que ellos tengan papel y lápiz y que escriben lo que usted les diga sobre las normas a seguir, como por ejemplo:

  • Les voy a entregar papel y lapiz. Les ruego escriban las normas que vamos a ir estableciendo, así como  las ideas o preguntas que vayan surgiendo.
  • Trato: ¿nos vamos a tratar de "tu" o "usted"?
  • No se fuma en la sala.
  • No se puede interrumpir.
  • No entraremos en el juego de las amenazas ni de las intimidaciones.
  • Si teneis preguntas o comentarios conviene que los escribais para plantearlos más tarde.
  • ¿Nos llamamos por nuestros nombres de pila?
  • Haremos sesiones de un máximo de 3 horas.
  • Cuando alguien necesite consultar, pararemos 10 minutos exactos.
  • A los 90 minutos tomaremos un refrigerio de 15 minutos.
  • Yo no cambiere y ustedes tampoco, no se puede traer un organizador la primera media hora y la segunda otro distinto.
  • En primer lugar me expondran sus intereses conjuntamente, luego hablare con ustedes por separado  seguidamente nos reuniremos de nuevo.
  • Total confidencialidad mia y de ustedes.
  • Llegaremos a un acuerdo o no, yo los ayudare a decidir como informar a su gente.
  • ¿Aceptan estas reglas?
  • ¿Aceptan que yo sea el mediador?
  • ¿Me quieren preguntar algo?
De esta forma vamos tratando de crear una atmósfera de tolerancia, equidad, respeto entre las partes y de solución de los problemas. En ese discurso debemos insistir: "Haré todo lo que este en mi mano para encontrar una solución".



Guía de referencia para el mediador

1. Definir las metas y los objetivos

  • ¿Qué es exactamente lo que quiero de esta mediación?
  • ¿Qué es lo mínimo que tengo que conseguir para satisfacer a las partes?
  • ¿Qué es lo que estoy dispuesto a ofrecer para obtener lo que deseo?
  • ¿Cuál es el tiempo que dispongo para concluir la mediación?

2. Esclarecer los detalles

  • ¿En qué detalles se apoya mi posición?
  • ¿Cómo se lo expondre a mis interlocutores?
  • ¿Cómo veran los detalles las partes y cómo apoyaran mi exposición?
  • ¿Cuáles son las implicaciones económicas, politicas y humanas de los detalles?

3. Reunir información

  • ¿Con qué personas me voy a reunir y qué sé de ellas?
  • ¿De qué manera enfocaran la mediación?
  • ¿Cuáles son sus necesidades individuales?
  • ¿Existe algo anormal?
  • ¿Se producen incongruencias?
  • ¿Hay lagunas de información?
  • ¿Tenemos suficiente información?
  • ¿Podemos hacernos una idea inicial?
  • ¿Hay puntos fuertes y debiles?
  • ¿Coinciden adecuadamente los elementos (intereses/procedimientos/relaciones/percepciones)?
  • ¿Cuándo y dónde se llevara a cabo la mediación? ¿Qué ventajas o desventajas tengo con esas circunstancias...? ¿Y ellos?
  • ¿Qué poder personal tengo para utilizarlo en forma constructiva dentro de la mediación?

4. Establecer un ambiente de cordialidad

  • ¿Cuál es la mejor forma en que puedo establecer armonia con la otra parte?
  • ¿Cómo puedo establecer un ambiente de ganar-ganar?

5. Prepararse para el conflicto

  • ¿Cuál es el principal punto de conflicto?
  • ¿Cómo puedo distinguir entre las necesidades y los deseos de los interlocutores?
  • ¿Cómo podre resolver los conflictos?
  • ¿Cómo respondere a los intentos de la otra parte por resolverlos?
  • ¿Qué concesiones estoy preparado a hacer? ¿Bajo qué condiciones?
  • ¿Qué debo esperar a cambio de mis concesiones?

6. Acuerdo y confirmación

  • ¿Qué grado de formalidad debe tener un acuerdo?
  • ¿Qué proceso de aprobación requerirá y cuanto tiempo llevara?
  • ¿Qué pasos se necesitan para su cumplimiento?

7. Analice la efectividad de la mediación

  • ¿El (equipo) mediador escucho a las partes?
  • ¿El (equipo) mediador le trato equitativamente?
  • ¿El (equipo) mediador trato equitativamente a la otra parte?
  • ¿El (equipo) mediador llegó a entender sus intereses?
  • ¿El (equipo) mediador le ayudo a entender mejor los intereses de la otra parte?
  • ¿El (equipo) mediador implico a ambas partes en la generación de alternativas que facilitasen el acuerdo?
  • ¿El (equipo) mediador proveyo de una interpretación de la ley o del contrato relevante para el caso? ¿Ayudo esto para resolver el caso?
  • ¿Se resolvió el caso o se mitigo el conflicto?
  • ¿Recurriran de nuevo las partes al mismo (equipo) mediador? ¿Por qué si? ¿Por qué no?

martes, 6 de julio de 2010

Etapas en el proceso de mediación





Tácticas de influencia en los procesos de negociación, Yuky y Tracey (1992)



Persuasión racional. Se emplean argumentos lógicos y evidencias objetivas. Por ejemplo: Te explica detalladamente por qué es adecuada la oferta de negociación que te propone la otra parte.
Intercambio. Se prometen recompensas o beneficios tangibles. Por ejemplo: Te ofrece considerar tu oferta de negociación siempre que tu consideres la suya.
Recurrir a aspiraciones. Se recurre a los valores, ideales y aspiraciones de la otra persona. Por ejemplo: Describe su oferta de negociación como una oportunidad única para el logro de tus aspiraciones de futuro.
Consulta. Se solicita participación y se consideran las ideas y sugerencias de otras personas. Por ejemplo: Se anima a terceras partes no directamente implicadas en la negociación a expresar su opinión sobre el asunto de la discusión.
Relaciones personales. Se recurre a los sentimientos de lealtad y amistad. Por ejemplo: Te pide que aceptes realizar una concesión en aras de vuestra amistad.
Adulación. Se halaga y adula. Por ejemplo: Te dice que eres la persona más cualificada para valorar en sus justo termino la oferta de negociación que va a realizar.
Legitimación. Se basa en las políticas, reglas, practicas habituales o tradicionales. Por ejemplo: Estima que su oferta de negociación es legitima, basandose en documentos como instrucciones de trabajo, estatutos o acuerdos internos.
Presión. Se exige y amenaza. Por ejemplo: Amenaza con romper las negociación si no aceptas su última oferta.
Coalición. Se recurre a la ayuda de otras partes implicadas. Por ejemplo: Pide a otras personas del entorno que te expliquen las razones por las que apoyan su propuesta.